enero 23, 2010

Latte

...es siempre distinto, su aroma varia de acuerdo a la procedencia de su estimulante, pero el es uno solo, reconfortante y acogedor, es un descanso, una pausa, una sonrisa y una conversación amigable. Posee la ternura y fortaleza, elegante, de hermandad, creo que Toscani tuvo que aprovecharlo para Benetton.

Hoy tuve uno en el desayuno, recuerdo que "al otro lado del charco" son diferentes, servidos de otra manera en realidad y los prefiero así. En ocasiones recuerdo los inviernos, el sonido al endulzarlo era el sonido de un nuevo día, la esperanza de que sea bueno. Te necesitare siempre y serás el cómplice de muchas nuevas aventuras, eres el estimulante que relaja... ah!, si un retorcido y mantecoso frances amigo tuyo te acompaña una mañana... llamame.

4 comentarios:

Beto, Poeta Maldito dijo...

no soy fanático del oro negro. pero a determindad hora, cuando la filosofía se extiende, es bienvenido. mi mejor relación la logré una temporada donde me levantaba muy temprano. nos solíamos abrazar en un bareto de la estación de tren de belgrano. mitad y mitad. acompañado de dos zapatillas chanfleadas que sancochaba. para la charla lo prefiero petróleo.

Rakumin dijo...

Gracias Beto por la conexion...cambio y fuera, espero encontrarte en otra quemada de neuronas.

Luis Vélez dijo...

Vaya, cada nueva experiencia de vida es un sacudón. Razonamiento en retrospectiva. Certísimo lo de Gárgamel y Shaggy. Hilarante, por cierto.

Luis Vélez dijo...

Éste sí iba acá, jeje:

Cada oda a un pequeño detalle es buenísima y saludable. Cito al Dale Cooper de Twin Peaks: "Una vez al día, todos los días, hazte un regalo. No lo planees, no lo esperes, sólo deja que suceda". Claro, Cooper tomaba café negro: http://www.youtube.com/watch?v=pPkNtg3Fvwk

Blog Archive